Aburrido empate en la Bombonera…

El superclásico terminó en un aburrido 0-0 en la Bombonera, por Copa Sudamericana. Hubo mucha fricción y casi nada de emociones en las áreas. 7 amarillas para River y sólo 2 para Boca.

La brega comenzó con un Boca Juniors que presionó en campo riverplatense, tratando de generar por su sector derecho, de la mano del «Burrito» Martínez, que duró poco en la cancha.

Iban apenas 5′ y Vangioni le cometió una dura falta al «Burrito», viendo prematuramente la amarilla. La amonestación, evidentemente, valió oro, ya que el atacante de Boca terminó siendo reemplazado a los 30′ por el chileno Fuenzalida, producto de una lesión en su tobillo.

Boca era queredón, pero no supo cómo darle trabajo a Barovero, mientras que, poco a poco, River comenzó a salir de asedio. Los Millonarios, luego del minuto 10′ comenzaron a empujar hacia el arco de Orión pero no pasó nada. Teo quiso algo, Pisculichi tenía todas las ganas pero no conseguía el socio que lo acompañe.

Era tanta la fricción que a los 38′ hubo una falta dura de Ponzio, quien vio la amarilla, y la cosa casi pasa a mayores. Luego del tumulto que se formó, insultos y todas esa cosas, llegó la paz y quedó por esa.

Barovero cometió un error garrafal en una pelota aérea, que bien pudo Boca haber aprovechado, pero al final nada pasó.

El segundo tiempo no fue tan diferente del primero; Boca, como buen anfitrión, se mostró dueño de la pelota, mientras que River trataba de salir de contra.

Con el correr del tiempo, el equipo millonario se fue quedando, se les notaba el cansancio. El uruguayo Sánchez llegó a caer presa de un calambre, pero aún así no se rindió. Fernando Gago, por lejos, fue el mejor jugador de Boca, e incluso, en los descuentos ganó una pelota aérea, cabeceó con vehemencia pero le salió al medio del arco, y Barovero acabó encontrando la pelota.

Gallardo tiene que llevarse el mérito porque supo parar muy bien a la defensa. Los jugadores se cerraron de tal forma, que Chávez y compañía no fueron capaces, si quiera, de moverse.

Partido de mucha marca cuyo mérito se lo llevan los volantes defensivos de ambas escuadras y no los habilidosos atacantes.

Fue tal el esfuerzo defensivo que hizo River para «sobrevivir» que acabó con 7 jugadores amonestados, mientras que Boca tuvo apenas 2.

La revancha será en 7 días en el Monumental. River está obligado a ganar para clasificar, ya que el 0-0 lo manda a los penales, mientras que el empate por goles lo elimina.

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Imagen: Soccerway
Foto: Télam

@lostribuneros

 

 

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