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Esteban «Cuchu» Cambiasso tuvo su «día de furia». El mediocampista argentino que milita en el Inter de Milán le propinó una patada descalificadora a un rival de la Juventus sobre el final del juego que pudo haberle quebrado una pierna.
Cambiasso tiene fama de ser un deportista correcto y no se le han conocido exabruptos en los 15 años de carrera profesional que lleva, pero la tarde del sábado fue para el olvido; el volante argentino, quien había ingresado al campo a los 66′, le puso un planchazo atroz a Giovinco, jugador del archirrival Juventus.
El equipo visitante se llevaba la victoria del Meazza sobre Inter por 2-1, quedando en el umbral del bicampeonato; Cambiasso había perdido los estribos y en una reacción absurda en el cuarto minuto de descuento, por poco no fracturó al jugador adversario.
La expulsión del jugador fue directa. Cambiasso, al ver la roja tomó consciencia de lo que hizo y antes del campo se acercó para ver cómo estaba Giovico. Luego del partido fue al vestuario de Juventus y se disculpó en persona con su adversario.
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